Canto a Inanna

Hoy en clase hemos leído este poema Canto a Inanna, asique  os traigo mi versión creativa de este texto, en la cual me pongo en los zapatos de Inanna para interpretar este monólogo que considero que ella podría tener si dejarán de amarla.

 Yo, la mujer infalible vestida de brillo, la de bondad amada, la diosa poseedora de poder, ¿cómo he podido ser derrotada? ¿Cómo he podido perder mi corona? ¿Apagar mi fuego? Mi abrigo de cielo y tierra ya no calienta. Los mortales ya no hablan de mí, solo hablan de ese nuevo héroe, que además es humano. Pero, ¿qué puedo hacer? Por mucho que quiera y pueda, no puedo matarle. Si lo hago, perderé mi bondad, mi brillo. Debo esperar, mantenerme al margen hasta volver a reinar. Confiar en que el tiempo pone a cada uno en su lugar. 

Este texto me ha llamado mucho la atención porque yo siempre he tenido cierta duda sobre qué es lo que viene primero, ¿ser amada o el poder? En este texto nos describen a Inanna como una diosa con mucho poder la cual es amada por todos, pero, en mi opinión, que todos te amen es lo que te da poder. Porque imagina un Dios en el que nadie cree, no sirve de nada. Por lo tanto según esto, pensaríamos que lo que viene primero es el ser amado, y luego el poder. Pero realmente, si no tienes poder, si no posees algo que te haga especial, ¿quien te amaría? Asique creo que siempre estaremos en ese círculo vicioso, sin saber si nos quieren por como somos, o somos así porque nos quieren. 

Dejando a un lado toda esta duda filosófica, os dejo por aquí algún dato que he encontrado sobre Inanna para que la queráis un poquito más.

-Se la conocía como la Reina del cielo. Era la diosa del templo de Eanna en la ciudad de Uruk.

-Mandó a su pareja (Dumuzi) a los infiernos porque él intentó ocupar su lugar cuando ella estaba en el inframundo. 

-Era hermana gemela de Utu. 



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