La ilíada

 El día de hoy en mi clase de literatura hemos hablado de La ilíada. No hemos leído la obra entera, sino unos fragmentos. Estos eran El diálogo entre Andrómaca y Hector y Príamo suplica a Aquiles por el cadáver de su hijo.

Refiriéndome a El diálogo entre Andrómaca y Hector:

Este texto me ha encantado porque he podido empatizar muy bien con Andrómaca. He sentido su desesperación por el intento fallido de convencer a Hector de no ir a la guerra. Ella ya ha pasado por la muerte de seres queridos por culpa de las guerras y no quiere repetir esa experiencia ni hacer que su hijo tenga que vivirla. Sin embargo, aunque también hable Hector, no consigo ponerme en sus zapatos. Será culpa de mi falta de neutralidad, pues nunca me han gustado las guerras y creo que si además tienes motivos por los que no ir, es un poco absurdo. Pero por otra parte pensándolo bien, me doy cuenta de que igual que Andrómaca quiere que se quede, el deseo de Hector es ir y luchar, defender su orgullo y su tierra.

Refiriéndome a La súplica de Príamo:

En este pasaje Príamo le pide a Aquiles unos días de tregua para poder celebrar el funeral de su hijo. Para mí, es muy conmovedor porque aún estando en una guerra, ambos lloran sus pérdidas juntos y Aquiles tiene piedad con Príamo incluso sin motivos porque aún siendo enemigos, ambos comparten dolor por la muerte de un ser querido.

Yo creo que nunca sería capaz de dialogar de esta manera con una persona que me ha generado tanto dolor como Aquiles a Príamo y por eso en parte me gusta tanto leerlo, porque puedo ponerme en una situación que jamás me habría planteado de no ser por el texto.